Showrooms virtuales, la nueva forma de relacionarse con el usuario
Las técnicas de venta y los espacios comerciales han ido evolucionando con el paso de los años. En la última década, la tecnología ha sido la que se ha llevado todo el protagonismo y su presencia se ha hecho notar en todos los sectores. Uno de los sectores más impactados es el comercio, que comienza a cambiar de espacios físicos a espacios virtuales para incrementar las ventas.
Elena González, colaboradora de ESDESIGN, que pertenece a Planeta Formación y Universidades, explica qué es este concepto y cómo se puede utilizar en el país. “Un showroom virtual es un espacio totalmente homónimo, en el que las empresas simulan un entorno físico e incorporan réplicas en 3D de sus productos. De este modo, los clientes tienen la posibilidad de ver el producto en cuestión desde todos los ángulos, acercarse y alejarse de la sala de exposición e incluso ver animaciones en 3D. El concepto se asemeja al de las pop-up stores, pero en vez de ser físicas, son virtuales”.
En México se han hecho grandes esfuerzos por integrar estas herramientas tecnológicas en diferentes mercados de manera gradual, conforme se desarrolla más y más tecnología para nutrir este campo. Por ejemplo, en 2015 el mexicano Diego Torres, del Instituto Politécnico Nacional, creó ispolo Visual Case, un visor de Realidad Virtual que permitía a sus usuarios experimentar nuevas formas de vivir un videojuego o simuladores de montañas rusas. Un año después, 2016, Forbes destaca el trabajo de Manuel Gutiérrez, socio fundador de InmersiON-VRelia, una empresa tecnológica de origen mexicano que incursionó y perfeccionó en su momento el uso de la VR y la AR. Conforme pasaron los años, algunas empresas comenzaron a ofrecer entre el público mexicano experiencias inmersivas vinculadas a la VR y la AR como el Showroom Arcade o el Festival Internacional Inmersiva.
¿Cómo implementar la realidad virtual para mejorar la experiencia de usuario?
Cuando se emplea la realidad virtual, se hace uso de auriculares o gafas inteligentes, que son las que consiguen transformar la realidad del usuario y permitirle experimentar como si realmente estuviera en este espacio virtual creado. “Los showrooms virtuales siempre se han relacionado con experiencias como los videojuegos. Sin embargo, el avance de la tecnología ha permitido que estos espacios se usen también con finalidades comerciales y no sólo para el entretenimiento. A través de las gafas virtuales y el diseño creativo de estos espacios, se puede crear una experiencia de compra única sin tener que moverse de casa” afirma Gonzalez.
Algunos de los usos de los showrooms virtuales son los siguientes:
• Realización de visitas virtuales a casas: los clientes pueden hacer un recorrido completo por las casas que les interesan sin tener que desplazarse.
• Crear tiendas virtuales: con la realidad virtual en un showroom, los comercios pueden crear copias exactas de sus tiendas en un entorno virtual.
• Realización de presentaciones virtuales de productos: en los showrooms virtuales, las empresas pueden crear sus productos digitalmente para que los clientes puedan interactuar con ellos.
• Manuales de usuario interactivos: gracias a esta posibilidad, las empresas pueden dar asistencia en tiempo real mientras el cliente usa el producto.
• Consultas en directo: la realidad virtual permite reproducir las experiencias individuales de los clientes.
• Promoción de marca: un showroom virtual es perfecto para conectar emocionalmente con los usuarios. Se pueden usar estos espacios para mostrar cómo se elabora un producto o compartir lo que hay detrás de su desarrollo.
• Estudio de mercado y de comportamiento de clientes: un entorno virtual como este hace mucho más fácil investigar acerca de los usuarios. Las marcas usan los datos de seguimiento e interacción para identificar lo que les gusta y lo que no. Con esto, los departamentos de marketing pueden adaptar sus mensajes para captar la atención del usuario.
• Recomendaciones personalizadas: un showroom virtual tiene la capacidad de ofrecer sugerencias al usuario en base, por ejemplo, a los productos que ha visto el cliente. Estos datos se recogen gracias a los dispositivos de seguimiento ocular y al software que se utiliza.
En la última década, la adopción de la realidad aumentada ha ido en aumento, especialmente en sectores como la educación, el turismo o la manufactura, y la tendencia indica que cada vez más empresas están integrando esta tecnología en sus operaciones. A modo de conclusión, González señala que “un showroom virtual es una herramienta imprescindible para todas aquellas marcas que deseen la mejor experiencia a sus clientes. Esta se vuelve inmersiva, práctica y emocionante, por lo que contribuye al aumento de la satisfacción del cliente y mejora la fidelidad a la marca o la industria”.